#Cubanos #Matanceros #Mujeres #ParaNiños #SigloXX
Abrigando el arroyo la caña brava, chorros de finas hojas al aire lanza. ¡Qué musicales ramos,
Yo tengo un sombrero alón donde cabe un aguacero, y botas que reconocen los caminos del vaquero. ¡Qué bien te sabré domar,
Tiene la vaca bermeja un ternerito de nata. Se lo encontró en el corral un jueves por la mañana. Quiso llevarlo a pasear
Caperucita Roja, juega conmigo: yo seré un día lunes y tú domingo. Juega conmigo:
Zapatero de mi pueblo: usa clavitos de plata en el par de botas nuevas que quiero para mañana. Han de ser de cuero rojo,
El cielo es un espejo y la gaviota suelta su vela blanca desde la costa. Marinera del aire,
Cuenta la estrella Polar que el puerto de Cabañas, los pescadores cubanos la nombraron capitana. Velero con altas velas
En Playa Larga, el uvero, como homenaje al valor de los niños artilleros, ya no florece en febrero: en abril abre la flor.
En el pozo viejo el sapo se baña; la luna, traviesa, se mete en el agua. En el pozo nuevo
Torito camagüeyano y de la sabana rey, he venido de muy lejos queriéndote conocer. Debajo del algarrobo
EL día, una rosa blanca. La noche, un caballo negro. (La tarde, una mariposa que ha detenido su vuelo.)
Mi papalote, ¡qué lindo mi papalote! Vuela y vuela como un pájaro mi papalote. Un pájaro de papel
Entre las lomas el día nace. Límpidas gotas la noche esparce sobre la hierba
¡Del monte cubano vengo, del monte cubano soy! Pinipiní Guásima baría, júcaro amarillo,
Cinta de arena para la nena. Gorro de sal para el coral. Y para el sol