Estoy viviendo en mundos paralelos
y además por completo diferentes
y en alguna ocasión son convergentes,
que es cuando se realizan mis anhelos.
Entre los dos no se suscitan celos
ni tampoco un vulgar regañadientes
que los pudiera hacer dos contendientes
dispuestos a tirarse de los pelos.
En uno de ellos soy protagonista
con más gente, me guste o me disguste,
mas en el otro con quien quiero actúo,
siendo el primero el real, que está a la vista
y el otro es el virtual, que es de más fuste
y en el que casi siempre formo un dúo.
El último adecúo
a lo que en el primero bien quisiera,
porque cuando lo intento, no hay manera.