Tengo ganas de amar y ser amado,
que la pasión galope por mis venas,
oír muy cerca el canto de sirenas
que me llamen al verme en tal estado.
Llegar donde mil veces he soñado
y atarme a sus encantos con cadenas,
para libar la miel de sus colmenas
y quedar para siempre aprisionado.
Es algo más que fiebre lo que siento
que me lleva directo a la locura,
necesitando un singular ungüento
que me vuelva de nuevo a la cordura
y tal sería ese feliz momento
en que me diera de placer hartura.
Gustando esa dulzura
la gloria se abriría ante mis ojos
al haber satisfecho mis antojos.