Canción marina sin espuma
Hoy,
si acaso el mar existiera
el mar sería un río negro.
Hoy cuando yo digo mar
es como si dijera sangre.
Anudados en mi garganta
tengo collares de sal.
Ya todas las olas saben
que mi llanto bajó al mar.
Aguas en mareas altas,
galopando por los aires.
Aguas claras, claras aguas,
¡si me lavaran el mal!
Quebrándose en tus espaldas
están todos mis paisajes.
Copiándome estrellas negras
están espejos cobardes.
¡Ay! Cómo bien quisiera
hundirme en tu pleamar.
Arrancar clavos de sangre
en una espalda del mar.