#Cubanos #Matanceros #Mujeres #SigloXX #SigloXXI #1991 #SeMeHaPerdidoUnHombre
Adiós, locura de mis treinta años, besado en julio bajo luna llena al tiempo de la herida y la azucen… Adiós, mi venda de taparme daños. Adiós, mi excusa, mi desorden bell…
Cuenta el pobre los fósforos y el rico sus palacios; aquél se ha salvado de las adulaci… y el dinero. Sus manos no pueden aplaudir en la…
I Hugo Ania Mercier: yo te quería. A tu cuerpo de hombre agonizante que irradiaba dolor como un diaman… a tu paso que insiste todavía,
Mi muchachito duerme tranquilo, sin canción. Se me perdió en el alba cuando salía el sol y desde entonces no oigo
Pregunto si llevo corazón cuando despierto el peligro entre… si me equivoca cuando preparo la única trinchera en su garganta.
¿Sería aquel beso ya clavándose sin que supieras darle cuerda para que saliese a bailar con el d… ¿Sería aquel beso
No quiere que montes en un columpio ni en el delfín de los rebeldes; no quiere que vengas
Te levanto la noche de la vida. Deshilvano una luz para tus sienes… Te visito en el agua y no me tiene… Cuando llego ya soy la despedida. Se desangra tu voz como una herida
Amor, ¿cómo es que vienes a darle al pensamiento tu estocada si estoy entre las sienes —débil mujer a golpes decorada— y apenas tengo trato con la aurora
Yo era débil, rubia, poetisa, bien casada. Tenía deudas y una salud de panetela blanca. Hicimos una casa pobremente,
Otra vez la batalla lenta y verde: tu perfil de muchacho resonante asomándome el fuego, y un instante de temblor en mi labio que te muer… Otra vez los dos ciegos y el hundi…
No lo puedo decir. La voz precisa quedó bajo el silencio sepultada; cuando retoza el crimen ya no es n… el diente que pelea en la sonrisa. No lo puedo decir. Y acaso es lar…
Estoy sobre la tierra, con mi fren… despidiendo las nubes del paisaje. Le regalo un suspiro al sol ponien… yo no me voy de viaje. Y comprenden el grito este que cal…
Llegué de noche. La luz era difícil; el cuarto pobr… Desnuda yo parecía un juguete de oro. Volví a vestirme
La nada pertenece a mi ternura. Digo la luz y vienen mariposas. Si yo supiera hacer alas hermosas Se las pondría siempre a la locura… Pero ¿qué vive aquí que no se cura…