Johnny Thunders se cayó del caballo, recuerda muy bien los nombres y la primera herida fue mortal. Ahora,
Una idea, un pensamiento de llegar a una cultura de entendimiento, se aísla ahí, en el sueño de nadie, en el vulgo de estos nuestros días o tiempos, donde el vigor de la palabra y el so...
Entre la espesura Entre el follaje Mis trémulas manos sustitutas De esas otras mías Manos de abordaje
Tengo los fans más extraños del mu… Me idolatran en sus agujeros Cobijados al arrimo de las sombras Como seres nocturnos o gusanos-cul… Queriendo vivir en el poema
Capacitarse es cubrirse de ortigas en lo desnudo de la profundidad, es un vuelo carencial de remedios contra la insatisfacción del espej… todo poeta anclado en el orgullo d…
Veo como siempre quise ver, con me… todo eterno. Indefenso ante lo ine… comprendiendo quizás a medias tu h… evitable veo. Como siempre quise h… Me gusta conversar con el espejo,…
(Dicen que tan solo unos pocos litros de sangre corren por el interior del ser humano, pero yo creo que es mentira, porque con mi sangre se compran coches, casas, se pagan viajes, la ba...
Me arde el estómago. Me tiemblan los huesos. ¿Cuántas veces me ha sonado el tel…
Como nos engañan los conceptos, tienes que ser así, asá, para ser normal, pues yo me rebelo, yo no quiero ser normal, ¿enfermo?, cuantas veces lo he repetido, no lo sé, niño ¿otra vez? ...
Hay una mosca en mi cocina Y no la consigo echar Molesta la muy esquiva Cómo la podré aguantar Disparo flechas desde el suelo
Yo soy poeta, algo me hace distint… de esos que predican la realidad, que yo amo y sufro, por necesidad, es pues el mío un espíritu extinto… Y vago perdido en un laberinto
A medida que se descuella por la t… de la visibilidad, el inmaduro poe… en las orejas, que escucha los rum… de la tormenta, destapa los sonido… palabras en su más inexacto aroma,…
El sabio y el tortugas. _Escucha. No lo oyes. Un pato haciendo cua-cua. _¿Y...? _Obvio tortuguilla. Si fuera un gato haría miau-miau. (El tortugas baja la vista avergonzado mientras el ...
Cuando Te visten De desprecios Que no te pertenecen Cuando te eligen
ficción, no es el miedo agigantado a lo inhóspito de la audacia, sino un miedo más desde la imagen que nos tomamos como propia, hasta el mismo centro de la obsesión, tarea del conocimie...