Recogido por Esteban Peicovich en su libro "Borges, el palabrista"
#Argentinos #PremioCervantes #SigloXX
El círculo del cielo mide mi glori… las bibliotecas de Oriente se disp… los emires me buscan para llenarme… los ángeles ya saben de memoria mi… Mis instrumentos de trabajo son la…
Quién les hubiera dicho que sus mayores vinieron por un mar, quién les hubiera dicho lo que son un mar y sus aguas. Mestizos de la sangre del hombre blanco, lo tuvieron en poco, mestizo...
En busca de la tarde fui apurando en vano las calles. Ya estaban los zaguanes entorpecid… Con fino bruñimiento de caoba la tarde entera se había remansado…
Uno de los discípulos del maestro quería hablar a solas con él, pero no se atrevía. El maestro le dijo: La historia es muy antigua, pero una tradición, que bien puede no ser apócrifa, h...
Me piden el cuento más memorable de cuantos he leído. Pienso en “El escarabajo de oro” de Poe, en “Los expulsados de Poker Fiat” de Bret Harte, en “Corazón de la tiniebla” de Conrad, en...
No habrá una sola cosa que no sea una nube. Lo son las catedrales de vasta piedra y bíblicos cristal… que el tiempo allanará. Lo es la… que cambia como el mar. Algo hay d…
Del otro lado de la puerta un homb… deja caer su corrupción. En vano elevará esta noche una plegaria a su curioso dios, que es tres, do… y se dirá que es inmortal. Ahora
La cárcel es profunda y de piedra; su forma, la de un hemisferio casi perfecto, si bien el piso (que también es de piedra) es algo menor que un círculo máximo, hecho que agrava...
Durante cien otoños he mirado tu tenue disco. Durante cien otoños he mirado tu arco sobre las islas. Durante cien otoños mis labios
En un ejemplar del primer volumen de las Mil y una noches (Londres, 1840) de Lane, que me consiguió mi querido amigo Paulino Keins, descubrimos el manuscrito que ahora traduciré al cast...
El libro es de Olaus Magnus el te… que no abjuró de Roma cuando el N… profesó las doctrinas de John Wyc… de Hus y de Lutero. Desterrado del Septentrión, buscaba por las t…
Silenciosas batallas del ocaso en arrabales últimos, siempre antiguas derrotas de una g… albas ruinosas que nos llegan desde el fondo desierto del espaci…
Nunca se había demorado en los goces de la memoria. Las impresiones resbalaban por él, momentáneas y vívidas; el bermellón de un alfarero, la bóveda cargada de estrellas que ta...
Dispersos en dispersas capitales, solitarios y muchos, jugábamos a ser el primer Adán que dio nombre a las cosas. Por los vastos declives de la noch…
En los sueños (escribe Coleridge) las imágenes figuran las impresiones que pensamos que causan; no sentimos horror porque nos oprime una esfinge, soñamos una esfinge para explicar el ho...