Dos de la mañana y no sé
si lo que escriba tenga sentido después.
Sentirse frustrado a esta hora es muy común,
más que nada en personas como yo.
No siento que sea parte de algo,
quizá los propósitos de mi existencia cambiaron;
estoy encontrando un propósito en este escrito.
Lean conmigo, “la necesito”,
en simples palabras necesito una vida.
Pueden suponer que la perdí, claro que no,
en todo caso no podría expresar lo que siento.
Busco algo que quizá no exista,
algo que quizá no este en este tiempo.
¿Pero como regresar al pasado?
No, no se puede, esta claro, no hay marcha atrás.
Quizá en sueños,
aunque mis sueños solo me llevan a un futuro incierto.
Quizá no fue mi tiempo, quizá este tiempo ni exista,
Quizá yo no exista.
Entiendo, aquí sentando entiendo, aunque vuelvo al inicio al despertar.
Dos de la mañana del día siguiente,
no explico el parecer de lo que escribí ayer.
Encuentro pistas que no es mi tiempo, pero aún así vivo.
Puedo decir entonces que nunca nací?
Quizá esa fue la verdad, quizá en un corto periodo de tiempo
mi existencia se limita a una palabra, “Tiempo”.
Este escrito es una revelación propia sin sentido de un amor perdido. Si, la perdí.