Y es que si tú me miras, la guitarra suena sin ser tocada; y es que si tú sonríes, la naturaleza permanece intacta; y es que yo sé un himno gigante y te extraño; y al extrañarte te sueño, y al soñarte te anhelo, y al quererte te pienso, y al pensarte sueño,
y sueño despierto...