Me castigué de sentir cualquier emoción
Por miedo a peligro
Perdí mi placer que habitaba en mi
Cada vez más pequeño
Más frío
Con el tiempo como los osos que hibernan se duerme un rato al son de la canción de invierno
Los avistados de primavera empiezan a encender la chispa
No mas llanto
No mas soledad
No mas miedo a explorar mi identidad