Un efímero aliento de instante per… Es un ocaso, es un ocaso. La luna se levanta con la eleganci… Qué grácil qué hermosa, preciosa m…

Dicho lo dicho hay entredicho en e…

Te he visto de frente. Reconocí una araña Te miré de lejos Reconocí a un gatito A la media distancia

Soy, como la esencia efímera una presencia como de quimera ideas memorias y todo amalgamado en la inmediación del espíritu ama… A este cuerpo tangible de lucidez…

Me quedé dormido y soñé que me que… soñaba que me quedaba dormido y so… Soñaba no soñar.

El gato, negro escurridizo, maestro de la noche, con ojos, ojos de fuego, fuego verde, verde místico, verde sabio. Encuentra al gato en la noche,

¿Donde más la belleza sino en lo s… En el parpadeo repentino después d… En la risa disimulada después de a… En el primer tacto de tu piel a la… Mientras duermes y te miro.

En un mar tranquilo y eterno sin t… Un cielo claro de estrellas distan… Un reflejo claro de uno en el agua… El asecho del aterrador reflejo pe… En la ensoñación disfrazado.

En el sueño, no hay recuerdo En la vigilia, solo el rastro de q… A veces en una palabra, otras una… No sé de qué se trata. Si es verdad todo esto o es la Ma…

Detrás de una banca, En la que me… atisbé con el rabillo del ojo una… Un cuadro color del blanco yacía p… Lo tomé, ya sabiendo lo que era.… La fotografía de un rostro, partid…

¿Quién yace oculto detrás de la vo… ¿Qué clase de encuentro buscan eso… ¿Quién eres tú que habitas este cu… ¿De cuantas vidas datan nuestras c… ¿Qué hace falta recordar?

No escuché tu grito pero noté tu muerte seis bocas en hito te hicieron silente. De mi sueño de granito

Soñé que no soñaba y miraba el trigésimo sexto vellito de tu ceja derecha, respingar el obsesivo orden de la corona de tus ojos, quitando el orden divino de tu mirada, entregando la per...