¡Aun estás en mi mente! Aun mi cuerpo, tiembla con tu recu… camino como ausente, y en ti soñando, las noches las pi… ¡Mis ojos se humedecen!

Que lo bueno y lo malo es la secue… Se sabe de antes del Advenimiento… Ha veces nos quedamos sin aliento Por instinto animal en consecuenci… A la llamada de la sin paciencia,

Después de ti Se pueden juntar Ríos, mares y océanos Dejar de volar las aves Esconderse el Sol y

Cumples años mañana día veinte Ha sido un goce haberte conocido Junto a ti soy feliz y consentido Sé que tu corazón así lo siente Tenemos complicidad elocuente

Invitando a meditar profundamente Como antes, tal vez lo hizo, José… Las olas del mar remansan en su or… Invadiendo las arenas suavemente. Al tiempo blancas gaviotas gentilm…

Son árboles desnudos que con sus hojas, crean en la tie… bellos tapices mudos ¡Siempre ganan, al verano, la guer… Ya en la playa, el “botellón” no s…

Sobre el Atlántico el viento Porta aromas de mujer La figura de tu ser Pareciome verla a oscuras Y apresado en mis locuras

Al cumplir los años nos damos cuen… Lo hermoso que son los amaneceres Dones que Dios día a día regala. Estando risueña, triste o, content… ¡Llorar y reír o, sufrí y amar!

Y ante sus pies la Luna se postró Y viendo que el Sol marchó a desc… En el Cielo su sombra proyectó ¡Miles de estrellas se vieron bril… Y si entre ellas la Luna le dejó

Sí, paseo junto a ti con orgullo, No es así, en otras parejas celosa… Fuisteis creadas tan dulces y herm… Que no hago caso, de ningún murmul… No se por qué al mirarte me aturul…

Y sabedor que fue hermoso Otras vivencias pasadas Con agrado recordadas Es tristemente penoso Que por no tener no tenga

Quiero tu boca Pegada a mi boca y Con un beso tuyo robarte el alma ¡Quiero que anide en mí con calma! Quiero en mis brazos tenerte

*** ¡Es poder del caballero el dinero! Dicen, que no hace la felicidad, pero solo habla de él, sin ser sin… el que no ve la triste realidad.

Y me quedé a oscuras Con el eco de la nada Y mis lágrimas brotaron Humedeciendo mis ojos Fue tan triste el despertar

En el corredor de la muerte Entre el corazón y la mente Presa de tu amor estuve Hoy cambió mi suerte La soga que ceñía mi cuerpo