Yo alabo al cielo porque me brindó… para mi fondo gemas, para mi marge… porque cuando la roca me muerde y… hay en mi sangre (espuma) filigran… porque cuando al abismo ruedo en u…

Por ti, por ti, clamaba cuando sur… infernal arquetipo, del hondo Ereb… con tus neutros encantos, tu faz d… tus senos pectorales, y a mí vinis… Sombra y luz, yema y polen a un ti…

Muy cerca de mi ocaso, yo te bendi… porque nunca me diste ni esperanza… ni trabajos injustos, ni pena inme… porque veo al final de mi rudo cam… que yo fui el arquitecto de mi pro…

La santidad de la muerte llenó de paz tu semblante, y yo no puedo ya verte de mi memoria delante, sino en el sosiego inerte

Con la mitad de un periódico hice un barco de papel, en la fuente de mi casa le hice navegar muy bien. Mi hermana con su abanico

Mi amada se fue a la Muerte, partió al Misterio mi amada; se fue una tarde de invierno; iba pálida, muy pálida. Ella que, por su color,

Como duerme la chispa en el guijar… y la estatua en el barro, en ti duerme la divinidad. Tan sólo en un dolor constante y f… al choque, brota de la piedra iner…

Los papelillos de colores que de los altos corredores lanzan al aire los chicuelos como bandadas caprichosas, en sus impensados vuelos

La ardilla corre. La ardilla vuela. La ardilla salta como locuela. —Mamá, la ardilla

Tal vez ya no le importa mi gemido en el indiferente edén callado en que el espíritu desencarnado vive como dormido... Tal vez ni sabe ya cómo he llorado

Dios mío, yo te ofrezco mi dolor: ¡Es todo lo que puedo ya ofrecerte… Tú me diste un amor, un solo amor, ¡un gran amor! Me lo robó la muerte

¡No te amaré! Muriera de sonrojos antes bien, yo que fui cantar mald… de blancas hostias y de nimbos roj… yo que sólo he alentado los antojo… de un connubio inmortal con lo inf…

Eres uno con Dios, porque le amas… ¡Tu pequeñez qué importa y tu mise… eres uno con Dios, porque le amas! Le buscaste en los libros, le buscaste en los templos,

¡Oh muerte, en otros días, que rec… sin emoción profunda, te tenía yo… En medio de la noche, incapaz de d… clamaba congojado: “Yo tengo que m… ¡Yo tengo que morir irremisiblemen…

Vivir sin tus caricias es mucho de… vivir sin tus palabras es mucha so… vivir sin tu amoroso mirar, ingenu… es mucha obscuridad...