Por Alejandra Micolta
Un aroma que me atrapa, embriaga y cautiva ese es tu aroma.
pero más allá de tu aroma deseo tu alma, tus labios y tu cuerpo, todo junto solo para mí. Egoísta lo sé pero es que cómo voy a dejar que todo eso se me escape eso nunca, porque te deseo tanto como la luna desea encontrarse con el sol.