Eres luz.
Irradias con fuerza,
estrella naciente.
Brillas suave,
faro hogareño.
No te acerques
a mi fosa,
océano abisal.
Has encontrado luz.
Sólo pienso en su sombra.
Sólo pienso en tu sombra.
Aléjate más de mí.
Querré volver, solamente,
a besar a tus hijos.
Y volveré a la profundidad
de la que no puedo salir.