Me dedico al modelaje. Me gusto y me miro al espejo como si quisiera buscar la mejor versión de mi y la encuentro. Es una sensación única el verte guapa, posar, bailar ante el espejo. En resumen, quererte, mimarte. Hacerle un guiño a tu yo interior es necesario, y gusta.
Lamento todas esas veces que no fui yo, que no me encontré en mi cuerpo, en las escenas en las que me arrastraba a ti y te suplicaba que te quedarás. Ese yo no le quiero, por eso ahora ya digo chao a esa sensación de abandono, de retirada. Al final hay que luchar, luchar por uno mismo, aunque nadie te siga. Aunque seas tú en tu soledad. A veces ahí, te encuentras, te respetas, te admiras, te das un vuelta y te sacas a bailar. Creo que ese es el mejor baile. Y tú espejo lo sabe:), que te hace fotos una y otra vez:)