Amo a la brisa, quiero abrazarla siempre. Mis brazos sufren en el intento y caen desolados, vacíos...

Cuando me abrazas, la vida se detiene. Es el consuelo de unir nuestros latidos y entregarnos los dos.

La rana duerme, tranquilidad nerviosa. ¡Puede saltar!

Entre las ramas, rosas blancas al viento. Luego, ¡el cielo!

En mármol frío reposan estos versos. Dejad que el viento me lo cuente al entrar por la ventana.

Se acerca el otoño, muy pronto nos llenaremos de colores y un chasquido turbador nos acompañará al pisar esas hojas secas que lo colmarán todo. Es un momento de reflexión y de paz, de r...

Gracias te doy por estar presente en el día a día. Tu amistad sincera es regocijo y aliento.

Si los sueños se pudiesen escoger y la vida fuese la manifestación de ellos, no habría por qué sufrir;

Los sentía tan cerca, que sus corazones latían junto al mío y sus risas... sus risas

Últimamente, o quizás desde hace bastante tiempo, me imagino cosas un tanto extrañas. Por ejemplo pienso, que “al doblar una esquina” Es esa sensación de enfrentarme a lo desconocido de...

Croa la rana, salta al oscuro charco. Mira al nenúfar.

Cada mes de abril de tan esperados… regresarán mis anheladas golondrin… revoloteando como hacían antaño, y volando cual muy ligeras bailari… Son bellas y pintorescas, voy a bu…

Acompañando al viento, la hoja seca se aleja en calma.

Y yo aún aquí, mientras canta la alondra y nace el día.

Cuando dormimos, vuela nuestra conciencia, si...¡no hay insomnio!