Tanta nostalgia anclada en el recuerdo. Vid goteando, y el río desbocado en su frío deshielo.

Gracias te doy por estar presente en el día a día. Tu amistad sincera es regocijo y aliento.

Las hojas secas se pierden junto al viento; ¡Adiós otoño! Y pleno de aire gélido llega el cálido invierno.

Croa la rana, salta al oscuro charco. Mira al nenúfar.

Acompañando al viento, la hoja seca se aleja en calma.

Grabo el instante, es el reto a seguir, y... llegas tú.

Hoy he caminado descalza sobre la hierba húmeda. Lo hice, cerrando los ojos,

¡Mi padre amado! te recuerdo y te extraño con gran nostalgia. En tu última mirada, no pude estar contigo.

¿Habéis pensado alguna vez que cuando nacemos somos ricos? La riqueza no se mide en dinero, se mide en tiempo, que es, el que en definitiva,

Fresca y ligera te refugias del sol y del mal viento. Con tu belleza húmeda, esparces la pureza.

Desde mi ventana todo parece igual, los árboles o aquella pared que una vez estuvo llena de musgo dando un verdor húmedo a mi jardín, pero no es cierto... Había un árbol grande que ya n...

¿Noche de estrellas, luciérnagas y luna? ¡Todas me alumbran!

Cuando el instante, la casualidad o el amor se acoplan; entonces, viviremos, entonces, ¡Naceremos!

Así, se nos va la vida. Así, nos llega la muerte...

Enlazadas nuestras tristes manos atravesamos la gran ciudad, sería nuestro último verano para enfrentar la realidad. Llegaste a tu morada final