A mi hija
(2013)
Bate sus alas con soberbia triunfal. Reina el silencio: Hay pasión que perturba... y una niña detrás.
Risas, alergias, manos entrelazadas... Tú y yo. Nosotros. Sexo, proyectos, lágrimas... Son quince años de amor.
Días sin fin que destrozan mi esencia. Incertidumbre... Con la fé que se agota, me pregunto: ¡¿por qué?!!
De anhelos cumplidos, de arrojo en el tiempo, de gente del alma que un día partió. De niñas de ensueño
Cuando parece que revientas de amor, ¡aún das más..!
Cuando tu aliento acaricia mi oreja.., embriagador, y no median palabras... ¿me invitas al placer?
Tú dime entonces, ¿qué se siente al saber que tantas noches de perplejos desvelos llegarían a Dios?
Llegaste tú, ternura que empalaga, pétalo frágil. ¿Por qué eres tan fugaz si te prefiero así?
Mientras los años no aminoren tus ganas, leas un libro y admires una flor, vivirás.., ¡nacerás...!
Si pudiera hacer un poema sería para ti. Porque vuelas entre nubes creando mil y una historias, porque ríes a destajo,
Varias palabras absurdas, un café que se deshiela, día plomizo o soleado, se escucha a un gato maullar... La midriasis les delata
Nos rigen ciclos que se antojan eternos. ¡Busca el valor! ¿Hogar? ¿Pasión? ¿Trabajo? Solo vuelve a empezar.
Complicidad de latidos y savia. Vientre fecundo portador de Esperanza... ¡El milagro de Dios!
¿Recuerdas aquella isla? Corre, llévame otra vez. Cierro los ojos.., consigo escuchar al mar o al viento que estremece mis sentidos
Paso las horas en el rincón de sueños, en mi delirio. Para que seas un hábito, para amarte sin más.