Ensueños
El tiempo, el que se escurre del espiral.
Me cuesta causar estragos en lo azaroso.
Cayo, absorbo, ignoro la incapaz tentación
del cuello del cielo,
extraigo escueto la culpa del silencio y la muerte,
que de repente burlan el firewall de la vida…
la eternidad carece de lapsos y estadías.
Temo callar la secuencia ilógica de una verdad
que de temor se urge en la estampa de la penumbra
insomne…
Despierto y no basta, la espalda asomada
Estalla de fervor y gigante es coraza de ensueños…
YDG, 7 de abril de 2009