En mis muchas noches de insomnio, llegas y te adueñas de todo.
Te adueñas de mi pensamiento y de mi aliento.
Estás cada noche en mi cabeza, a cada pestañeo y en cada sueño.
Quisiera ser yo quien pudiera tener ese poder; de poder entrar en tu pensamiento y a tu vida hacerla girar en un momento de silencio.
Para encontrarte a ti mismo pensando en mí.
Llévate mis miedos si estás aquí.
Me robas todo suspiro en en cada noche de insomnio.
Tienes tanto de mí, que no sé cómo lo permití, mientras que yo sigo en el intento de llegar a ti.
No te es suficiente todo lo que te doy.
Ya te he dado todo lo mío, todo lo mío te lo doy.
Te he dado cada aliento y cada suspiro,
Cada pensamiento y cada pestañeo.
Cada momento de mis noches de insomnio.
Y cada sueño ha sido tuyo.