Sonia Fernandez

Asomándome

Mirando por la ventana
Verde trébol, valle ensalza,
Enraíza la añoranza
Igual que prende la niebla
En tardes anubarradas.
Lastre que el alma destempla,
Desenvainada y expuesta,
Dilata las noches desveladas.
Aún repaso sus letras,
Aún con mirada desvirtuada,
Recala en mí su bramido hondo,
Retumban en la orilla
Sacudidas caracolas
Por feroces olas escupidas.
Desde aquel azul abismo
Verde y azul se aúnan.
Huellas de salitre adheridas
A los fondos de mis tímpanos
De tacto humedecido.
Por cada palabra leída
Se escapa un resoplido
En vitela solapado.
Misiva que porta
Unos signos cautivos
De su vigor forjado,
Más allá de sus odas,
Más allá de la tinta
Que resiste tan lejana
Idolatría extinta.
 
Se embelesa la conciencia
Cada vez que el espíritu
Terco se aposenta y,
Halla paz en su esencia.
...absorbe con gusto su jugo
Y recoge y cultiva la siembra
En su surco,
Que en su alejado asilo
Su corazón detenta.

Preferido o celebrado por...



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