(2006)
Ojalá pudiera decir todo lo que si… Ojala no tuviera cadenas que me impidieran hacerlo. Ojala fuera valiente y pudiera explicar
Te siento en la oscuridad de la no… como luna que me acuna y me abraza… Sosegado me cubres de besos. Te t… te busco, te encuentro, rozo tu cu… Entre besos, mi sexualidad sedient…
Roza tu rostro sin permiso, Mueve tu cabello suavemente, sacude con su vaivén tu cuerpo Y tú, tú tan sólo te estremeces. Cierras los ojos y aspiras,
Llovía, no tenía nada que hacer y se aburría. Apoyada en la ventana, recogiendo en su cuerpo la humedad del ambiente miraba como las gotas de agua se deslizaban incansablemente por los ...
Ahí está él. Marcado en su rostro el tiempo, que implacable ha pasado en silencio. La calle le cobija.
Nos miramos fijamente intentando descubrir si realmente es mutuo ese desasosiego que nos abrasa como si las venas fuesen ríos de lava que fluye libremente por su cuerpo. No, no es un...
Ven junto a mí y siéntate a mi lad… come de mi plato, bebe de mi vaso, comparte tus silencios conmigo. Acomódate en el hogar de la lumbre… deja que el reflejo de tus ojos br…
No tenía que ser así, pero le impa… Esa mirada limpia y esa sonrisa ar… hicieron que se sintiera tan atraí… como una niña traviesa, y le mirar… sin poder ocultar lo que sus ojos…
El bono metro se le había atascado en el bolsillo do la chaqueta, la correa de la cartera que colgaba de su hombro hacia que fuera difícil manipular para extraer el pase del bolsillo. P...
Paseando por la vida la encontré, escondida en un rincón, asustada, con miedo..., pero deseando aprender a volar. Su vida no había sido feliz del todo, pero es lo que habí...
Despedazando prudencias entre cuer… Saboreo tu piel a mi paso liberand… Codiciando sabores, deleitándome c… regalados por insinuaciones de roc… Deshaciéndome entre las yemas de t…
Déjame degustar los retazos de pas… En la sensibilidad que remolonea e… Aún siento tus dedos acariciándome… Tu lengua recorriéndome lentamente Y mi piel erizada atrapa el último…
Quiero ser gozada, gozar Encendida, arder… a sorbos saciar tu sed, jadeante… excitada. Tú, vehemente me retas.
A ellos, los menos nombrados pero no por ello menos importantes. En homenaje al padre. Esa persona que está, en muchas ocasiones en un segundo plano, pero que te da tanto como está a su...
Si supieras cómo te deseo, cómo mi piel se resquebraja perturbada por mis sentimientos. y grito tu nombre en silencio con ahogados alaridos mudos.