Ahí se va la niña, aterciopelada, vestida de fiesta, y color marfil. zapatos violeta, collar de corales,

Fue en la Sierras de Ongamira en el Valle de Punilla, tierra de la pequeña Puna donde abunda la grandeza, ungidos con fortaleza

Violencia. porque de ti, se aprovecha la crueldad, y la libertad contigo, esta molesta,

Y pensaremos en ti, Frida abrazando tu alma, no para sentir la calma, ni siquiera compañía, sino acariciando heridas,

Las palabras no se las lleva el vi… si quien las dice, las dice desde… podrán ser, tildadas de inocentes, pero nunca de huecas o profanas. Las palabras que ojalá se lleve el…

Hay gente que ha renunciado a disfrutar y solo habla de sus tristes desventuras. Para esa gente

Los árboles soñaban con su ausenci… y en el crepúsculo las hojas murmu… “No hay pena que dure mucho tiempo… ni tristeza que no encuentre una m… Y las flores novias del colorido i…

Salió del bajo arrabal, caminó por calle ajena, por eso a esa Magdalena, la llamaron Soledad. Y con su cresta rosada,

Nunca el silencio, por la siniestra presencia de los… por desear y hasta intentarlo, por recurrir a sueños vanos, por defender lo simple y lo común.

No somos esquirlas. ni voluntades vagas, ni pesadumbres vanas ni liviana badana que calza cuando quiere

Memoria no me abandones, aunque te exija el dolor, apartar a la pasión, olvidar reclamos justos, mientras lo cruel y lo injusto,

El miedo arengaba presuroso, a sus fieles y miedosos seguidores… *Cuidado, no reclamen lo que es ju… no se opongan al poder de los peda… dejen que se abusen, ellos pueden,

Escuchar y disentir, abre mente y corazones. Innumerables razones, e innumerables posturas, circundan nuestras culturas,

Que a la ingenuidad se la considera adolescente, y que al desafinado, lo incomoda cantar una canción. Estimados Paula Galano y Fernando Rio les hago llegar mi poema, reiterándoles mi...

Desde "El Andén" veo llover aquí en La Cumbre y la lluvia mi espíritu ilumina. No pueden aunque quieran las heridas,