Hijo audaz de la llanura
y guardián de nuestro cielo,
que arrebatas en tu vuelo
cuanto empaña su hermosura:
¡Ven, y vierte tu frescura
de mi Patria en el ambiente!
¡Ven, y enérgico y valiente,
bate el polvo en mi camino,
que hasta soy más argentino
cuando azotas en mi frente!