Tú mi vida, esta noche me has borr… del corazón y hasta del pensamient… y tal vez, sin saberlo, me has neg… dándome por perdido ya en el vient… Más luego, vida, vi cómo llorabas,

Del barco que yo tuviera serías tu la costurera. Las jarcias, de seda fina; de fina holanda, la vela. ¿Y el hilo marinerita?

¡Qué altos los balcones de mi casa! Pero no se ve la mar. ¡Qué bajos! Sube, sube, balcón mío,

¡Ah, Miss X, Miss X: 20 años! Blusas en las ventanas, los peluqueros lloran sin tu melena —fuego rubio cortado—.

Subes del mar, entras del mar ahor… Mis labios sueñan ya con tus sabor… Me beberé tus algas, los licores de tu más escondida, ardiente flor… .

Nevada, clara de nieve, flor de los témpanos, tú, sobre una corza marina. Norte. Sur. Dorada, clara de oro,

Entraña de estos cantares: ¡Sangre de mi corazón, tarumba por ver los mares! El mar. La mar. El mar. ¡Sólo el mar!

Cuando para mí eran los trigos viv… y la escarcha los lloros helados d… alguien me enyesó el pecho y la so… traicionándome. Ese minuto fue el de las balas per…

¡Vendo nubes de colores: las redondas, coloradas, para endulzar los calores! ¡Vendo los cirros morados y rosas, las alboradas,

Zarza florida Rosal sin vida. Salí de mi casa, amante, por ir al campo a buscarte. Y en una zarza florida

—Bien puedes amarme aquí, que la luna yo encendí, tú, por ti, sí, tú, por ti. —Sí, por mí. —Bien puedes besarme aquí,

Hombres de mar, eterno buscador que nunca encuentr… en el horizonte azulado del cielo… eternas despedidas, regresar quizá… partes siempre mirando el horizont…

En un verso de ocho sílabas ¿qué no cabrá, si es una y tan sólo en ella cabe el mar? Ocho sílabas son muchas