#Andaluces #Españoles #Generación27 #PremioNobel #SigloXX
Toca la campana de la catedral, ¡Y yo sin zapatos yéndome a casar! ¿Dónde está mi velo,
«—Sería de aquí, de Toledo, de una de estas calles quebradas, de estas grietas profundas por donde un hombre con los brazos en cruz no cabría; de uno de estos enjutos pasillos, hechos m...
(Poema Representable) 1, 2, 3 y 4 En estas cuatro huellas no caben m… Si en estas cuatro huellas no cabe… ¿de quién son estas cuatro huellas…
¿Qué tienes, dime, Musa de mis cu… —Nostalgias de la tierra, de la ma…
Sal tú, bebiendo campos y ciudades… en largo ciervo de agua convertido… hacia el mar de las albas claridad… del martín-pescador mecido nido; que yo saldré a esperarte, amortec…
Oh tú, mi amor, la de subidos seno… en punta de rubíes levantados, los más firmes, pulidos, deseados, llenos de luz y de penumbras lleno… Hermosos, dulces, mágicos, serenos
«Pueblo: has llorado, has sufrido, mordido el polvo y mordido a los que te han dominado. Hoy subes fortificado. Tus flautas, ayer heridas,
Un año, ya dormido, alguien quien no esperaba se paró en mi ventana. —¡Levántate Y mis ojos vieron plumas y espadas.
Ni el humo, ni el vapor, ni la neb… Lejos de aquí ese aliento que dest… Una luz en los huesos determina y con la sombra cómplice construye… Pensativa sustancia la pintura,
Dentro del pecho se abren corredores anchos, largos, que sorben todas las mares. Vidrieras, que alumbran todas las calles.
Madre, vísteme a la usanza de las tierras marineras: El pantalón de campana, la blusa azul ultramar y la cinta milagrera.
La dulzura, el estupro, la risa, la violencia, la sonrisa, la sangre, el cadalso, la feria. Hay un diablo demente persiguiendo
Blanca-nieve se fué al mar, ¡Se habrá derretido ya! Blanca-nieve, flor del norte se fué al mar del mediodía, para su cuerpo bañar.
(Muerte) A un niño, a un solo niño que iba… para ángel indiferente de una esca… Mirad. Conteneos la sangre, los o… A sus pies, él mismo, sin vida.
Asombro de la estrella ante el des… de su cardada lumbre en alborozo. Sueña el melocotón en que su bozo Al aire pueda amanecer cabello. Atónito el limón y agriado el cuel…