Cristo en la cruz. Los pies tocan… Los tres maderos son de igual altu… Cristo no está en el medio. Es el… La negra barba pende sobre el pech… El rostro no es el rostro de las l…
Que el hombre no sea indigno del Á… cuya espada lo guarda desde que lo engendró aquel Amor que mueve el sol y las estrellas* hasta el Último Día en que retumbe
La pregunta es retórica; sé demasiado bien la respuesta. Es temer y contar en la alta noche las duras campanadas fatales, es ensayar con magia inútil una respiración regular, es la carg...
Yo, que tantos hombres he sido, no… aquel en cuyo abrazo desfallecía M… Gaspar Camerarius, en Deliciae P…
Me acuerdo, fue en Balvanera, en una noche lejana, que alguien dejó caer el nombre de un tal Jacinto Chiclana. Algo se dijo también
Desde la otra vereda volví a mirar; usted se había dado vuelta y me dijo adiós con la mano. Un río de vehículos y de gente corría entre nosotros; eran las cinco de una tarde cualquiera;...
En su grave rincón, los jugadores rigen las lentas piezas. El tabler… los demora hasta el alba en su sev… ámbito en que se odian dos colores… Adentro irradian mágicos rigores
Ya puedes ver el trágico escenario y cada cosa en el lugar debido; la espada y la ceniza para Dido y la moneda para Belisario. ¿A qué sigues buscando en el brumo…
Quisimos aprender la despedida y rompimos la alianza que juntaba al amigo con la amiga. Y alzamos la distancia entre las amistades divididas.
Bruscamente la tarde se ha aclarad… porque ya cae la lluvia minuciosa. Cae o cayó. La lluvia es una cosa que sin duda sucede en el pasado. Quien la oye caer ha recobrado
Déjame que esparza Manzanas en tu sexo Néctares de mango Carne de fresas; Tu cuerpo son todas las frutas.
Te dije, te digo y te dire porque el amor es para siempre. Te digo por ejemplo, te quiero ahora que hace calor y ayer que llovia.
Margarita está linda la mar, y el viento, lleva esencia sutil de azahar; yo siento en el alma una alondra cantar;
Mi boca ha pronunciado y pronunciará, miles de veces y en los dos idiomas que me son íntimos, el padre nuestro, pero sólo en parte lo entiendo. Esta mañana, la del día primero de julio ...
Yo soy aquel que ayer no más decía el verso azul y la canción profana… en cuya noche un ruiseñor había que era alondra de luz por la maña… El dueño fui de mi jardín de sueño…
Qué importan las penurias, el dest… la humillación de envejecer, la so… del dictador sobre la patria, la c… que vendieron sus hermanos mientra… (los días que uno espera olvidar,…
En el Asia Menor o en Alejandría, en el segundo siglo de nuestra fe, cuando Basílides publicaba que el cosmos era una temeraria o malvada improvisación de ángeles deficientes, Niels Run...
Mis ojos, sin tus ojos, no son ojo… que son dos hormigueros solitarios… y son mis manos sin las tuyas vari… intratables espinos a manojos. No me encuentro los labios sin tus…
A lo largo de sus generaciones los hombres erigieron la noche. En el principio era ceguera y sueñ… y espinas que laceran el pie desnu… y temor de los lobos.
Cuando me miras mis ojos son llaves, el muro tiene secretos, mi temor palabras, poemas. Sólo tú haces de mi memoria
Habré de levantar la vasta vida que aún ahora es tu espejo: cada mañana habré de reconstruirla… Desde que te alejaste, cuántos lugares se han tornado van…
Todas las cosas tuvo y lentamante Todas la abandonaron. La hemos vi… Armada de belleza. La mañana Y el arduo mediodía le mostraron, Desde su cumbre, los hermosos rein…
De fierro de encorvados tirantes de enorme f… para que no la revienten y la desf… las muchas cosas que mis aborrotad… las duras cosas que insoportableme…
Podrá nublarse el sol eternamente; Podrá secarse en un instante el ma… Podrá romperse el eje de la tierra Como un débil cristal. ¡todo sucederá! Podrá la muerte
Cuando los vientos murmuradores llevan los ecos de mi laúd con los acentos de mis amores resuena un nombre, que de rumores pasa llenando la esfera azul.
Mi propósito es reconsiderar, a la luz de otros pasajes de la Comedia, el enigmático relato que Dante pone en boca de Ulises (Infierno, XXVI, 90, 142). En el ruinoso fondo de aquel círc...
En un establo que está casi a la sombra de la nueva iglesia de piedra, un hombre de ojos grises y barba gris, tendido entre el olor de los animales, humildemente busca la muerte como qu...
País verde y herido comarquita de veras patria pobre país ronco y vacío tumba muchacha
Compañera usted sabe puede contar conmigo no hasta dos o hasta diez sino contar conmigo si alguna vez advierte
El universo (que otros llaman la Biblioteca) se componte de un número indefinido, y tal vez infinito, de galerías hexagonales, con vastos pozos de ventilación en el medio, cercados por ...
Gentil o hebreo o simplemente un h… cuya cara en el tiempo se ha perdi… ya no rescataremos del olvido las silenciosas letras de su nombr… Supo de la clemencia lo que puede
Mi Pedro no es soldado; no ambici… de César ni Alejandro los laurele… si a sus sienes aguarda una corona… la hallará del estudio en los verg… ¡Si lo vierais jugar! Tienen sus…
Para cruzarlo o para no cruzarlo ahí está el puente en la otra orilla alguien me esper… con un durazno y un país traigo conmigo ofrendas desusadas
Sollozaba Chopín en el piano... Tu mano acariciaba melodiosamente el teclado... Tu frente
Sin proponérmelo al principio, he consagrado mi ya larga vida a las letras, a la cátedra, al ocio, a las tranquilas aventuras del diálogo, a la filología, que ignoro, al misteri...
Érase un hombre a una nariz pegado… érase una nariz superlativa, érase una nariz sayón y escriba, érase un pez espada muy barbado. Érase un reloj de sol mal encarado…
—Ésta—dijo Dunraven, con un vasto ademán que no rehusaba las nubladas estrellas y que abarcaba el negro páramo, el mar y un edificio majestuoso y decrépito que parecía una caballeriza v...
Antes que los remeros de Odiseo fatigaran el mar color de vino las inasibles formas adivino de aquel dios cuyo nombre fue Prot… Pastor de los rebaños de los mares
Amar es este tímido silencio Cerca de ti, sin que lo sepas, Y recordar tu voz cuando te marcha… Y sentir el calor de tu saludo. Amar es aguardarte
Mis libros (que no saben que yo ex… son tan parte de mí como este rost… de sienes grises y de grises ojos que vanamente busco en los cristal… y que recorro con la mano cóncava.
¿Qué soñará el indescifrable futuro? Soñará que Alonso Quijano puede ser don Quijote sin dejar su aldea y sus libros. Soñará que una víspera de Ulises puede ser más pródiga que el poema...
Sabrás que no te amo y que te amo puesto que de dos modos es la vida… la palabra es un ala del silencio, el fuego tiene una mitad de frío. Yo te amo para comenzar a amarte,
Yo seré a tu lado, silencio, silen… perfume, perfume, no sabré pensar, no tendré palabras, no tendré dese… sólo sabré amar. Cuando el agua caiga monótona y tr…
Qué espléndida laguna es el silenc… allá en la orilla una campana espe… pero nadie se anima a hundir un re… en el espejo de las aguas quietas
Cada abeja con su pareja. Cada pato con su pata. Cada loco con su tema. Cada tomo con su tapa. Cada tipo con su tipa.
Está bien que se mida con la dura sombra que una columna en el estío arroja o con el agua de aquel río en que Heráclito vio nuestra locur… El tiempo, ya que al tiempo y al d…
En Londres, a principios del mes de junio de 1929, el anticuario Joseph Cartaphilus, de Esmirna, ofreció a la princesa de Lucinge los seis volúmenes en cuarto menor (1715-1720...
Hombres negros pican sobre piedras… tienen en sus picos enredado el so… Y como si a ratos se exprimieran a… lloran sus espaldas gotas de charo… Hombres de voz blanca, su piel neg…
En el segundo patio la canilla periódica gotea, fatal como la muerte de César. Las dos son piezas de la trama que… el círculo sin principio ni fin,
En un caracol rosado de la playa de Girón sobre el nácar hay grabado: “¡Cada cubano un soldado; cada soldado un león!”
No salió de una madre ni supo de m… Idéntico es el caso de Adán y de… Está hecho de azar. Inmediato o c… lo rigen los vaivenes de variables… No es un error pensar que nace en…
Cuando era como vos me enseñaron l… y también las maestras bondadosas… que libertad o muerte era una redu… a quien se le ocurriria en un país donde los presidentes andaban sin…
Cuando tus manos salen, amor, hacia las mías, qué me traen volando? Por qué se detuvieron en mi boca, de pronto,
Eres invulnerable. ¿No te han dad… los números que rigen tu destino certidumbre de polvo? ¿No es acaso tu irreversible tiempo el de aquel… en cuyo espejo Heráclito vio el sí…
Se perdió el laberinto. Se perdie… todos los eucaliptos ordenados, los toldos del verano y la vigilia del incesante espejo, repitiendo cada expresión de cada rostro huma…
Libros, callados libros de las est… vivos en su silencio, ardientes en… libros, los que consuelan, terciop… y que siendo tan tristes nos hacen… Mis manos en el día de afanes se r…
Hay gente que con solo decir una p… enciende la ilusión y los rosales, que con sólo sonreír entre los ojo… nos invita a viajar por otras zona… nos hace recorrer toda la magia.
El que abraza a una mujer es Adán… Todo sucede por primera vez. He visto una cosa blanca en el cie… luna, pero qué puedo hacer con una… Los árboles me dan un poco de mied…
Hemos perdido aun este crepúsculo. Nadie nos vio esta tarde con las m… mientras la noche azul caía sobre… He visto desde mi ventana la fiesta del poniente en los cerr…
¿Dónde estará mi vida, la que pudo haber sido y no fue, la venturosa o la de triste horror, esa otra co… que pudo ser la espada o el escudo y que no fue? ¿Dónde estará el per…