#EscritoresArgentinos
Sigo solo me sigo y en otro absorto otro beodo lodo… por neuroyertos rumbos horas opio… me persigo
No se me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo; un cutis de durazno o de papel de lija. Le doy una importancia igual a cero, al hecho de q...
No sólo el fofo fondo los ebrios lechos légamos telúrico… y sus líquenes no sólo el solicroo
¡Azotadme! Aquí estoy, ¡azotadme! Merezco que me azoten. No lamí la rompiente,
No estoy. No la conozco. No quiero conocerla. Me repugna lo hueco, la afición al misterio,
Y sacaréme la niebla el turbio zumo oscuro del traspien… la pulpa la soborra de mente toda su gris resaca me sacaré hast…
Es una intensísima corriente un relámpago ser de lecho una dona mórbida ola un reflujo zumbo de anestesia una rompiente ente florescente
En la eropsiquis plena de húespede… enlunadados muslos de estival epic… tumultos extradérmicos excoriaciones fiebre de noche que… y aola aola aola
A unos les gusta el alpinismo. A otros les entretiene el dominó. A mí me encanta la transmigración. Mientras aquéllos se pasan la vida colgados de una soga o pegando puñetazos sobre un...
Yo no sé nada Tú no sabes nada Ud. no sabe nada El no sabe nada Ellos no saben nada
Este clima de asfixia que impregna… de una anhelante angustia de pez r… Este hedor adhesivo y errabundo, que intoxica la vida y nos hunde en viscosas pesadillas…
Los nervios se me adhieren al barro, a las paredes, abrazan los ramajes, penetran en la tierra, se esparcen por el aire,
«Las mujeres cuestan demasiado trabajo o no valen la pena. ¡Puebla tu sueño con las que te gusten y serán tuyas mientras descansas! »No te limpies los dientes, por lo menos, con los se...
Solo, con mi esqueleto, mi sombra, mis arterias, como un sapo en su cueva,
Forjada en la “Fábrica de Armas y… la ciudad muerde con sus almenas un pedazo de cielo, mientras el Tajo,