#EscritoresCamagüeyanos #EscritoresCubanos #LaPalomaDeVueloPopular
Sobre el duro Magdalena, largo proyecto de mar, islas de pluma y arena graznan a la luz solar. Y el boga, boga.
Ayé me dijeron negro pa que me fajara yo: pero e que me lo desía era un negro como yo. Tan blanco como te ve
La palma que está en el patio, nació sola; creció sin que yo la viera, creció sola; bajo la luna y el sol,
La vida empieza a correr de un manantial, como un río; a veces, el cauce sube, a veces, el cauce sube, y otras se queda vacío.
Canto para matar a una culebra. ¡Mayombe—bombe—mayombé! ¡Mayombe—bombe—mayombé! ¡Mayombe—bombe—mayombé! La culebra tiene los ojos de vidri…
Paloma del palomar, cuando tú pases por México no dejes de preguntar quien me cerró la puerta a que llamo yo,
Camina, caminante, sigue; camina y no te pares, sigue. Cuando pase por su casa
Cuando yo vine a este mundo, nadie me estaba esperando; así mi dolor profundo se me alivia caminando, pues cuando vine a este mundo,
Ésta es la canción del bongó: —Aquí el que más fino sea, responde, si llamo yo. Unos dicen: Ahora mismo, otros dicen: Allá voy.
José Ramón Cantaliso, ¡canta liso!, canta liso, José Ramón. Duro espinazo insumiso: por eso es que canta liso
¡Qué de cosas lejanas aún tan cerca, mas ya definitiva— mente muertas! La autoridad de voz abrupta
¡Oh Camagüey, oh suave comarca de pastores y sombreros! No puedo hablar, pero me gritan la noche, este misterio; no puedo hablar, pero me obligan
¡Ay, negra, si tú supiera! Anoche te bi pasá y no quise que me biera. A é tú le hará como a mí,
Soldado, aprende a tirar: Tú no me vayas a herir, que hay mucho que caminar. ¡Desde abajo has de tirar, si no me quieres herir!
Te voy a beber de un trago, como una copa de ron; te voy a echar en la copa de un son, prieta, quemada en ti misma,