#EscritoresNicaragüenses #Modernismo #SigloXIX #SigloXX #1887 #Abrojos #EscritoresNicaraguenses
Ama tu ritmo y ritma tus acciones bajo su ley, así como tus versos; eres un universo de universos y tu alma una fuente de canciones. La celeste unidad que presupones
Amo los pálidos rostros y las brunas cabelleras, los ojos lánguidos y húmedos propicios a la tristeza, y las espaldas de nieve,
Nada mejor para cantar la vida, y aun para dar sonrisas a la muert… que la áurea copa donde Venus vier… la esencia azul de su viña encendi… Por respirar los perfumes de Armi…
Maestro, Pomona levanta su cesto.… saluda la aurora. Tu aurora! Que… de la indiferencia la mancha; que… la dura cadena de siglos; que apla… al sapo la piedra de su honda.
¿Que lloras? Lo comprendo. Todo concluido está. Pero no quiero verte, alma mía, llorar. Nuestro amor, siempre, siempre...
Sangre de Abel. Clarín de las bat… Luchas fraternales; estruendos, ho… Flotan las banderas, hieren las me… Y visten la púrpura los emperadore… Sangre del Cristo. El órgano sono…
Pues si el torno de la Inclusa es un buzón verdadero, ¿adónde llevan los ángeles las cartas para el infierno?
Joven, acérquese acá, ¿Estima usted su pellejo? Pues escúcheme un consejo, que me lo agradecerá: Arroje esa timidez
Sobre el jarrón de cristal hay flores nuevas. Anoche hubo una lluvia de besos. Despertó un fauno bicorne tras un alma sensitiva.
¿Qué pude yo hacer para merecer la ofrenda de ardor de aquella mujer a quien, como Ester,
He aquí que Cyrano de Bergerac tr… de un salto el Pirineo. Cyrano es… ¿No es en España, acaso, la sangr… Al gran gascón saluda y abraza el… ¿No se hacen en España los más be…
Sí, yo he escrito estos Abrojos tras largas penas y agravios, ya con la risa en los labios, ya con el llanto en los ojos. Tu noble y leal corazón,
Amar, amar, amar, amar siempre, co… el ser y con la tierra y con el ci… con lo claro del sol y lo oscuro d… amar por toda ciencia y amar por t… Y cuando la montaña de la vida
Mi pobre alma pálida Era un crisálida. Luego mariposa De color de rosa. Un céfiro inquieto
Yo vi un ave que süave sus cantares entonó y voló...