#EscritoresAndaluces #EscritoresEspañoles #EscritoresSevillanos #Generación98 #Modernismo
No se callaba la fuente, no se callaba... Reía, saltaba, charlaba... Y nadie sabía
Morir es... Una flor hay, en el s… —que, al despertar, no está ya en… de aromas y colores imposibles... Y un día sin aurora la cortamos. II
Alma son de mis cantares, tus hechizos... Besos, besos a millares. Y en tus rizos, besos, besos a millares.
¡Oh la paz, oh la paz, oh la bendi… paz de un paisaje matinal!... ¡Cri… de mi ventana al campo!... ¡Oh la… de la copla entre los cañaverales! Frente al sol generoso, junto al r…
Frutales cargados. Dorados trigales... Cristales
Antonio, en los acentos de Cleopa… la copa de oro olvida que está de… Y, creyente en los sueños que evoc… toda en los ojos tiene su alma de… La reina, hoja tras hoja, deshojan…
Ven, reina de los besos, flor de l… amante sin amores, sonrisa loca... Ven, que yo sé la pena de tu alegr… y el rezo de amargura que hay en t… Yo no te ofrezco amores que tú no…
“José Antonio, ¡Maestro!... ¿En… en qué sol, en qué estrella peregr… montas la guardia? Cuando a la div… bóveda miro, tu respuesta espero. Toda belleza fue tu vida clara.
Ya están ambos a diestra del Padr… los dos santos varones, el chantre… el Grant Santo Domingo de Silos… y el Maestre Gonzalo de Berceo no… Yo veo al Santo como en la sabida…
Sueña el león. Junto a las tres palmeras se amansa el sol. Existe el agua. Y Dios deja un momento que los pobres camellos se arrodil…
Del color del lirio tiene Gerinel… dos grandes ojeras; del color del lirio, que dicen loc… de amor de la reina. Al llegar la tarde,
Canto de soleares, hondo cantar del corazón, hondo cantar. Reina de los cantares. Madre del canto popular.
¡Qué bonita es la princesa! ¡Qué traviesa! ¡Qué bonita! ¡La princesa pequeñita de los cuadros de Watteau!
Arquitecturas instantáneas sobre una pausa suspendidas, apariciones no llamadas ni pensadas, formas de viento, insubstanciales como tiempo
Atrás el cielo, atrás la luz y su navaja, atrás los muros de salitre, atrás las calles que dan siempre a… Atrás mi piel de vidrios erizados,