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Cleopompo y Heliodemo, cuya filos… es idéntica, gustan dialogar bajo… palio del platanar. Allí Cleopomp… la manzana epicúrea y Heliodemo fí… al aire su confianza en la eterna…
Puso el poeta en sus versos todas las perlas del mar, todo el oro de las minas, todo el marfil oriental; los diamantes de Golconda,
El olímpico cisne de nieve con el ágata rosa del pico lustra el ala eucarística y breve que abre al sol como un casto aban… De la forma de un brazo de lira
Sobre el jarrón de cristal hay flores nuevas. Anoche hubo una lluvia de besos. Despertó un fauno bicorne tras un alma sensitiva.
¡Dies irae, dies illa! ¡Solvet seclum in favilla cuando quema esa pupila! La tierra se vuelve loca, el cielo a la tierra invoca
¡Divina Psiquis, dulce mariposa i… que desde los abismos has venido a… lo que en mi ser nervioso y en mi… forma la chispa sacra de la estatu… Te asomas por mis ojos a la luz de…
Vienes? me llega aquí, pues que su… Un soplo de las mágicas fragancias Que hicieran los delirios de las l… En las Grecias, las Romas y las… ¡Suspira así! Revuelen las abejas
Un día oí una risa bajo la fronda… vi frotar de lo verde dos manzanas… erectos senos eran las lozanas man… del busto que bruñía de sol la Sat… Era un Satiresa de mis fiestas pa…
¡Su padre los echa! Yo, ha poco,… soberbio, iracundo, lanzarlos de a… No importa, hijos míos; diré como… «¡Dejad a los niños que vengan a m…
¡Argentina! Tu ser no abriga la riqueza tentacular que a Europa finesecular incubó la furia enemiga. Y si oyes un día explotar
Tenía una cifra tu blanco pañuelo, roja cifra de un nombre que no era el tuyo, mi dueño. La fina batista
¿Cuentos quieres, niña bella? Tengo muchos que contar: de una sirena de mar, de un ruiseñor y una estrella, de una cándida doncella
En la tranquila noche, mis nostalg… En busca de quietud, bajé al fresc… En el oscuro cielo, Venus bella t… como incrustado en ébano un dorado… A mi alma enamorada, una reina ori…
A un tal que asesinó a diez y era la imagen del vicio, muerto, el Soberano Juez le salvó del sacrificio sólo porque amó una vez.
El varón que tiene corazón de lis, alma de querube, lengua celestial, el mínimo y dulce Francisco de As… está con un rudo y torvo animal, bestia temerosa, de sangre y de ro…