A Ribeiro Couto
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Amarás la belleza, que es la sombr… No hay arte ateo. Aunque no ames… No darás la belleza como cebo para… No te será pretexto para la lujuri… No la buscarás en las ferias ni ll…
La bailarina ahora está danzando la danza del perder cuanto tenía. Deja caer todo lo que ella había, padres y hermanos, huertos y campi… el rumor de su río, los caminos,
Flor, flor de la raza mía, Sombra… ¡qué dulce y terrible tu evocación… El perfil de éxtasis, llama la sil… las sienes de nardo, l’habla de ca… Cabellera luenga de cálido manto,
La mujer que no mece a un hijo en… cuyo calor y aroma alcance a sus e… tiene una laxitud de mundo entre l… todo su corazòn congoja inmensa ba… El lirio le recuerda unas sienes d…
Mi amigo me escribe: “Nos nació u… La carta esponjada me llega de aquel vagido; y yo la abro y po… el vagido caliente en mi cara. Les nació una niña con los ojos su…
¡Boca temblorosa, boca de canción: boca, la de Teócrito y de Salomón! La mayor caricia
Fina, la medianoche. Oigo los nudos del rosal: la savia empuja subiendo a la rosa… Oigo las rayas quemadas del tigre
El mar sus millares de olas mece, divino. Oyendo a los mares amantes, mezo a mi niño. El viento errabundo en la noche
¡Dulce Señor, por un hermano pido… indefenso y hermoso: ¡por el nido! Florece en su plumilla el trino; ensaya en su almohadita el vuelo. ¡Y el canto dices que es divino
Las madres contando batallas sentadas están al umbral. Los niños se fueron al campo, la roja amapola a cortar. Se han puesto a jugar a los ecos
Con el mentón caído sobre la mano… el Pensador se acuerda que es carn… carne fatal, delante del destino d… carne que odia la muerte, y tembló… Y tembló de amor, toda su primaver…
—Pende en la comisura de tu boca, pende tu confesión, y yo la veo: casi cae a mis manos. Di tu confesión, hombre de pecado, triste de pecado, sin paso alegre,
Pasa por nuestra Tierra la vieja Cabalgata, partiéndose la noche en una pulpa clara y cayendo los montes
Madrecita mía, madrecita tierna, déjame decirte dulzuras extremas. Es tuyo mi cuerpo
Volcán de Osorno, David que te hondeas a ti mismo, mayoral en llanada verde, mayoral ancho de tu gentío. Salto que ya va a saltar