#EscritoresEspañoles #EscritoresMadrileños #SigloXVI #SigloXVII
Desde que viene la rosada Aurora hasta que el viejo Atlante esconde… lloran mis ojos con igual porfía su claro sol que otras montañas do… y desde que del caos adonde mora
Pasé la mar cuando creyó mi engaño que en él mi antiguo fuego se temp… mudé mi natural, porque mudara naturaleza el uso, y curso el daño… En otro cielo, en otro reino extra…
Si fuera de mi amor verdad el fueg… él caminara a tu divina esfera; pero es cometa que corrió ligera con resplandor que se deshizo lueg… ¡Qué deseoso de tus brazos llego
Celebró de Amarilis la hermosura Virgilio en su bucólica divina, Propercio de su Cintia, y de Cori… Ovidio en oro, en rosa, en nieve p… Catulo de su Lesbia la escultura
Pasando el mar el engañoso toro, volviendo la cerviz, el pie besaba de la llorosa ninfa, que miraba perdido de las ropas el decoro. Entre las aguas y las hebras de or…
A mis soledades voy, de mis soledades vengo, porque para andar conmigo me bastan mis pensamientos. ¡No sé qué tiene la aldea
Céfiro blando que mis quejas trist… tantas veces llevaste, claras fuen… que con mis tiernas lágrimas ardie… vuestro dulce licor ponzoña hicist… selvas que mis querellas esparcist…
Zagalejo de perlas, hijo del Alba, ¿dónde vais que bace frío tan de mañana? Como sois lucero
En una playa amena, a quien el Turia perlas ofrecía de su menuda arena, y el mar de España de cristal cubr… Belisa estaba a solas,
Quejosas, Dorotea, están las flor… que las colores las habéis hurtado… y la frígida nieve se ha quejado de que mayores son vuestros rigore… Quejoso está el amor, que los amor…
Por las riberas famosas de las aguas de Jarama, junto del mesmo lugar que Tajo las acompaña, alegre sale Belardo
—Pluma, las musas de mi genio auto… versos me piden hoy. ¡Alto, a escr… —Yo sólo escribiré, señor Burguil… éstas que me dictó rimas sonoras. —¿A Góngora me acota a tales hora…
Cuelga sangriento de la cama al su… el hombro diestro del feroz tirano… que opuesto al muro de Betulia en… despidió contra sí rayos al cielo. Revuelto con el ansia el rojo velo
¿Quién es aquel Caballero herido por tantas partes, que está de expirar tan cerca, y no le socorre nadie? «Jesús Nazareno» dice
Sale la estrella de Venus al tiempo que el sol se pone, y la enemiga del día su negro manto descoge, y con ella un fuerte moro