Estando yo allí con aqueste deseo,
abaxa una nuve muy grande y escura;
el aire fuscando con mucha presura,
me çiega e me ciñe que nada non veo;
e ya me temía, fallándome reo,
non me conteçiese como a Polifemo,
que desque çiego en la gruta de Lemo
ovo lugar el engaño ulixeo.