Y que yo me la llevé al río creyendo que era mozuela, pero tenía marido. Fue la noche de Santiago y casi por compromiso.

Amor de mis entrañas, viva muerte, en vano espero tu palabra escrita y pienso, con la flor que se march… que si vivo sin mí quiero perderte… El aire es inmortal. La piedra in…

¡Ay qué trabajo me cuesta quererte como te quiero! Por tu amor me duele el aire, el corazón y el sombrero.

Fresquísimas violas. Bandadas de rubores levantados por este don de lágrimas que enlaz… la muchedumbre de las viejecillas con la niña y el niño de mi frente…

En la casa se defienden de las estrellas. La noche se derrumba. Dentro, hay una niña muerta con una rosa encarnada

Princesa enamorada sin ser corresp… Clavel rojo en un valle profundo y… La tumba que te guarda rezuma tu t… a través de los ojos que ha abiert… Eras una paloma con alma gigantesc…

El Mascarón. ¡Mirad el mascarón! ¡Cómo viene del África a New York… Se fueron los árboles de la pimien… los pequeños botones de fósforo. Se fueron los camellos de carne de…

¡Fita aquel branco galán, olla seu transido corpo! É a lúa que baila na Quintana dos mortos. Fita seu corpo transido,

Las manos de mi cariño te están bordando una capa con agremán de alhelíes y con esclavina de agua. Cuando fuiste novio mío,

Pero como el amor los saeteros están ciegos. Sobre la noche verde, las saetas,

Yo me alivié a un pino verde por ver si la divisaba, y sólo divisé el polvo del coche que la llevaba. Anda jaleo, jaleo:

La canción, que nunca diré, se ha dormido en mis labios. La canción, que nunca diré.