por obra y omisión
Tras el monte de la vuelta, laderas de Tacoronte, el vetusto y arcano sol al lubrican sumergido liba el brumoso horizonte.
No hay nada más reconfortante que sentir como que se amoldan a tus deseos Como te hacen la vida cómoda, se ajustan a tus formas,
¿quién no soporta al crítico? ¡el político! ¿quienes son los más mangantes? ¡los gobernantes! ¿quién del embuste es un artista?
Escribo, sin saber porqué, pero persisto y escribo, con el pie presto al estribo de ese imperioso corcel que va emborronando el papel
¿Mejor, callar lo que pienso? ¿podría lamentarlo después? Sin reproches ni porqués voy a otorgar el dispenso, —aun pasando por menso—
¿Tener siendo o ser teniendo? dilema, si has de escoger. Se puede tener siendo, pero no ser por tener. Con la incógnita me enervo,
MUSA ESTIVAL Las estrellas, testigos silencioso… parpadean con timidez en la noche… Sus destellos titilan en el lienzo… guiando mi sueño con su luz sempit…
¿De que sirven los poetas si no hacen soñar al pueblo? ¿de que sirven sus palabras si no compromete el verso? Canta y haz que las conciencias
Hoy, rematando el último capitulo y en el umbral de uno nuevo, quiero detenerme un instante para abrazarte con palabras, con deseos que nacen del corazón vestidos de esperanza. Este año...
A nuestros egos insaciables les hace falta un escarmiento tal vez un nuevo ordenamiento que incluya menos variables. En esta sociedad insociable,
Líbrame del envidioso del pelusero egoísta del avaro egocentrista del resentido receloso del insaciable codicioso
¿Quieres comer calabaza? tendrás que sembrar semillas, mucho antes labrar la arcilla, estercolar bien la haza, asumir las amenazas,
La lógica y la razón, entre dogmas y doctrinas, son palabras anodinas, cuando por imposición, soslayas la erudución
Es frágil el nexo de unión, —abundo con abundancia, y valga la redundancia–, entre orador y oración, entre prédica y adjuración.
Con el vaiven de las olas meciéndose en lontananza, absorto pasa las horas, así recobra esperanzas, como avezado serviola