Los versos del capitán
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Plena mujer, manzana carnal, luna… espeso aroma de algas, lodo y luz… qué oscura claridad se abre entre… Qué antigua noche el hombre toca c… Ay, amar es un viaje con agua y co…
El sabor de tu boca y el color de… piel, boca, fruta mía de estos día… dímelo, fueron sin cesar a tu lado por años y por viajes y por lunas… y tierra y llanto y lluvia y alegr…
Amor, una pregunta te ha destrozado. Yo he regresado a ti desde la incertidumbre con espinas… Te quiero recta como
Cuba, flor espumosa, efervescente azucena escarlata, jazminero, cuesta encontrar bajo la red flori… tu sombrío carbón martirizado, la antigua arruga que dejó la muer…
Oh pedazo, pedazo de miseria, ¿en… tienes tus manos albas y tu cabeza… ... Y tanto andar, y tanto llorar… sin saber qué dolores fueron los q… Sin saber qué pan blanco te nutrió…
Alta sobre la tierra te pusieron, dura, hermosa araucaria de los australes montes,
No estés lejos de mí un solo día,… porque, no sé decirlo, es largo el… y te estaré esperando como en las… cuando en alguna parte se durmiero… No te vayas por una hora porque en…
Y te perdí mujer. En el camino me prendiste una lámpara fragante, entonces se aromaron y se hicieron… todos estos cansancios humildes y… No sé si apenas eras una leyenda o…
Chisporrotea en el aceite hirviendo la alegría del mundo:
Soy el tigre. Te acecho entre las hojas anchas como lingotes de mineral mojado. El río blanco crece
Si pudiera llorar de miedo en una… si pudiera sacarme los ojos y comé… lo haría por tu voz de naranjo enl… y por tu poesía que sale dando gri… Porque por ti pintan de azul los h…
Cuando el deseo de alegría con sus… escarba los azufres caídos durante… y su red natural, sus cabellos son… a mis habitaciones extinguidas con… allí la rosa de alambre maldito
Tu casa suena como un tren a medio… zumban las avispas, cantan las cac… la cascada enumera los hechos del… tu risa desarrolla su trino de pal… La luz azul del muro conversa con…
Era mi corazón un ala viva y turbi… y pavorosa ala de ahelo. Era la Primavera sobre los campos… Azul era la altura y era esmeralda… Ella—la que me amaba—se murió en…
Detrás de mí en la rama quiero ver… Poco a poco te convertiste en frut… No te costó subir de las raíces cantando con tu sílaba de savia. Y aquí estarás primero en flor fra…