Él nació en el mes de enero
Él murió en el mes de mayo.
Lo desplomó del caballo
El disparo de un riflero.
Tomó la pluma en la mano
Y contó cuentos en flor;
No quiso ser escritor,
Quiso ser, antes, cubano.
Tuvo de pétalo el alma,
y el querer como un acero.
Fue grande: un hombre sincero
De donde crece la palma.