Es un verso
que de habérmelo propuesto
lo hubiera escrito yo.
Mi voz
la palabra publicada tiene mi voz.
Ese murmullo que te vuelve loca.
Cuántas veces vi explotar tu sexo
entre mis signos de puntuación
y te lo dije:
Nena
tu amor no tiene límites
te detendré en una palabra.
Locura y vértigo ya no tengo más
todo transcurre como necesario
inevitable
ardiente
y en ese ardor
todo lo que transcurre
es Poesía.
Ella desnuda en medio de mi pecho
este siglo se quedará con nosotros
a divertirse, a dormir simplemente.
La haré trabajar de puta
y la haré
subir hasta los astros.
Inventaré un oído cósmico
para su voz
doliente de terráqueo.