Juventud brillante, con ideas al vuelo, capacidad inmensa, sueños en desvelo. Pero el mundo ciego, no quiere escuchar, desprecia sus voces, su forma de pensar.
Ignorados, caminan con fuerza y pasión, buscando un lugar, una nueva canción. Sus mentes despiertas, con luz y verdad, son luces en sombras, en la oscuridad.
Aunque despreciados, no dejan de luchar, sus sueños persisten, como olas en el mar. Y un día, sus voces, serán escuchadas, la juventud ignorada, será celebrada.