Me parte el corazón, me parte El sentimiento, Porque tu lo sabes muy bien Cuanto te amo, Y así me tienes comiendo de

Ayer soñé con una dulce niña me pareció algo sufrida y romántic… entre la tarde que la iba conocien… surgió algo lindo en la plática. Surgió de nuevo la escritura

Cuando pretenciosa mi Lorena va, Entonces, fluye, intensamente y du… Esa belleza que hace juego con su… Y me llena de elogio plácidamente. Cuando pasa frente a mis ojos, yo…

Muy triste y frío en lo no explica… Siento una languidez que apenas, Me cubre todo, como inevitable Mi alma llora en consciente penas. Esa soledad, mi amiga tan lejana

No digas que no me quieres, que es… Mentirle a nuestro Dios de arriba… ¡Ya ves que sin querer brota la ro… Así es nuestro amor como una semil… Es la ley del amor, del que está e…

Un gran talento embarga A nuestro admirable Julio Ortega, Los dioses le han puesto Una escalera para llegar al cielo, Desde mi amado portal poético

Mujer bella –dulce miel– de mi cor… Que me provocas ansiar tocarte, Soy el desesperado por tu loca pas… Boca de lirio, tengo ganas de besa… Vive dentro de ti, mi ansiedad amo…

Estos labios que se mueren por la… Mueren por la delicia de tus besos… Me lleno de cosas, me robo tu imag… Y apenas sueño con robarte uno de… Digo cosas donde aparece tu nombre

Tengo a mi Dios como mi fortaleza Es mi fuente profunda y poderosa, Nadie puede penetrar su impureza En mi santo jardín de fragante ros… Si mi Dios nunca me hubiera conoc…

Llegaron los recuerdos al sentimie… recuerdos que ya habían pasado y a pecar me invita al pensamiento a un encuentro de deseo imaginado. Aún siendo una pasión del pensamie…

Adelante, belleza. Un poco más, e… En el camino. ¿Que llevas la fren… Sigue, sigue, caminando. Oh, que… Con viento de amor, magia y ternur… Entre tu cabello rubio, que suelto…

En el corazón Del albañil, Hay un alma, Que se pone A crear,

Eres ese sentimiento sin armadura Ese que a mí corazón acompaña, valientemente su amor perdura y pone fin con honor a la mañana. Ese amor que en batalla lucha

MADRE MÍA: tú que me has ofrendado la vida, desde lo más profundo de tus entrañas, y que desde aquel día que salí de tu vientre me has dado una carnal apariencia, la más tierna, con una...