El dolor de este mal que me consume
Por culpa de la espina que tengo por Rosa.
Malévola fragancia de su perfume
Que goza querer llevarme tras la fosa.
Fuego negro y apartado que me sume
Tiempo de llanto para mal me espera,
La espesa sombra derrotada me insume
Seguir por el colmo de mi andadera.
Sólo hay una tenaz y tan franca historia
El dolor que mantiene mi lirio encendido,
Como un ruin que entiende por escoria
Y que a mi corazón lo tiene enardecido.
No sé de dónde proviene este dolor mío
Que yo entiendo por ofrenda dolorosa,
Que me llena de un insensatez vacío
Ondulando bajo su frecuencia poderosa.