Fue como en un delirio
así que no recuerdo
si el hotel del abismo
era un abyss sheraton
o un abyss hilton
sé sin embargo que ostentaba
cinco estrellas
todas fugaces
una piscina olímpica
de ozono azul
y dos enormes ventanales
uno con vista a un remoto big bang
y otro al big crump / ese destino
también tengo presente
a un huésped distinguido
un tal jean baudrillard
que aplaudía
frenético
la prodigiosa llaga del big crump
tan cerca de sus manos condenadas.