#SigloXX #SigloXXI #Uruguayos #1979 #Cotidianas
A esta altura ya nadie me nombra por mi nombre: Octavio. Todos me llaman abuelo. Incluida mi propia hija. Cuando uno tiene, como yo, ochenta y cuatro años, qué más puede pedir. No pido ...
La inagotable sangre que se vierte… los crímenes que amueblan las mejo… los parricidios los incestos los t… las erinneas las moiras ilustran las rabietas celestiales
Pongo estos seis versos en mi bote… con el secreto designio de que alg… llegue a una playa casi desierta y un niño la encuentre y la destap… y en lugar de versos extraiga pied…
Ven dulce vida / nunca es tarde salta sobre las vallas de aflicció… sobre las confidencias del escombr… sobre los odios vestidos de blanco y las coronas de crisantemos
Sabemos que el alma como principio… es una caduca concepción religiosa… pero que en cambio tiene vigencia… segunda o sea hueco del cañón de las armas…
Tengo una soledad tan concurrida tan llena de nostalgias y de rostros de vos de adioses hace tiempo
El torturador ya retirado se sienta frente al mar en los atardeceres la gaviota planea
La soledad es un oasis está en litigio no tiene sombra y es puro hueso la soledad es un oasis
Los árboles ¿serán acaso solidarios? ¿digamos el castaño de los campos… con el quebracho de entre ríos o los olivos de jaén
Ya nadie graba en las paredes en los troncos luis y maría raquel y carlos
Nosotras las viejitas democráticas ni huesos conseguimos para el cald… pero como escuchamos Radio Carve nosotras le tenemos miedo al cambi… Esa pensión que nos brinda el gobi…
El primero de enero de mil novecientos sesenta y nueve la señora de lot gusana del vedado no resiste el consuelo de la tenta…
El 21 de noviembre de 1975, Buenos Aires empezó siendo una mañana fría, soleada, menos húmeda que de costumbre. Como todos los viernes, las calles del centro eran desde temprano u...
Había oído mencionar su nombre, pero la primera vez que la vi fue un rato antes de subir al vapor de la carrera. Mis viejos y mis hermanas habían venido a despedirme y estaban alg...
Cierro los ojos para disuadirme. Ahora no es, no puede ser la muert… Está el escarabajo a tropezones, mi sed de ti, la baja tarde inmóvi… De veras está todo como antes: