Del firmamento caen frescos y frágiles copitos de nieve.
Gran poder es saberse moderar.
Vive para crear no solo para existir.
El sabio estima a todos, porque cada persona tiene una virtud.
Persistentes brisas cubren el azul oscuro del rizado mar.
Mar chileno amigo de la cordillera, cuyas aguas bajan en verdes venas hasta mezclarse
La felicidad crece al ser compartida.
Del suelo mana agua láctea mana purpúreo vino mana néctar de rubias abejas que sube como oloroso incienso
El tiempo tiene su labor en el telar convulsionado del tiempo.
Mirad hacia la montaña. Se ha posado un arcángel blanco ¡¡Albino!! como la nieve. Vigila con su espada los transparentes velos
Hasta para coger los frutos debes estirar los brazos.
El pájaro ama el viento y el oxígeno ama al aire. El pájaro traza su estela en el cielo y al final de su diaria carrera,
Alégrate por el bienestar de otros. La envidia, envenena el alma.
Si haces las cosas con bondad, tu recompensa será la felicidad.
¡Oh! mar verdiazul coronada estás de remolinos y blancos torbellinos.