Dá, sin esperar nada a cambio. Ésa es la felicidad plena.
Mirad hacia la montaña. Se ha posado un arcángel blanco ¡¡Albino!! como la nieve. Vigila con su espada los transparentes velos
Del firmamento caen frescos y frágiles copitos de nieve.
Persistentes brisas cubren el azul oscuro del rizado mar.
La mariposa en el mar se posa.
La piedra lanzada en el lago viajaba como un astro dejando su estela de circunferencias locas.
Luna dulce, luna de azúcar, en la inmensa taza del firmamento.
Los errores provienen de la impaciencia humana.
En los grandes aprietos es bálsamo para el alma hallar un buen corazón.
Cada despertar del disco ardiente del Sol, es una mañana llena de inocencia y plenitud.
Mar tempestuoso, de agitada melena de león rugiente.
Si haces las cosas con bondad, tu recompensa será la felicidad.
Te conviertes en lo que piensas.
La comitiva de mujeres danzaban y reían al tañir los tambores y un ala de oro se despegaba del sol.
Debes descansar. pero no dejar que las cosas se hagan solas.