Esa inocencia que retorna, esa fortaleza que te inunda, belleza ante tus ojos, lealtad motor de vida. Esos caballos que galopan,

Entretejidos los silencios como la urdimbre dentro del lienzo queda, ocupando espacios

Entre las piedras crece el musgo dónde la ciencia era un don, gentes de aquellas tierras universos tan dispares. Pirámides, antiguos habitantes,

Teorías, universos, cuerdas. Energía cuántica en movimiento, materia inerte nuestro cuerpo, torbellinos en movimiento, millones de partículas inestables,

Luces y me miras dulces son tus labios en la ocre tierra donde el olivo habita y el buitre vuela

Encriptando la soledad del latido mientras te amo en silencio rompiendo la barrera del sonido. Eco que implosiona en los sentidos encriptando la soledad del momento

En el eco del silencio, desbocan mis latidos. Se resecan mis labios en la espera… quema la piel que te desea, rompen los moldes de la historia

Y las nubes tapizan el cielo cubriendo tu dolor el alma empequeñecida produce sinsabor tu aciaga mirada

Clave de sol sobre mi pecho colores en mis pupilas sonrisas escondidas mejillas sonrojadas latidos desbocados

Estímulos, percibo sensaciones, se cruzan mis neuronas, la música se asoma a la mirada, fragancia de suave almizcle siente… oler el rojo carmín de tus labios…

Una sonrisa cultiva tu rostro encanecido, se amoldan los años a tu cintura, tus manos sellan

Y las nubes tapizan el cielo cubriendo tu dolor el alma empequeñecida produce sinsabor tu aciaga mirada