En el caudal del agua,
embalsada
con furia descarga
la cascada
la vida que lleva dentro
abrazando-te
besando-la
acariciando la piel
que te reclama.
Se mezclan humedades
las luces del sol se filtran
el eclipse se hace vida
entre dos cuerpos
que se funden y se gozan.
El azmicle y el sudor
entre sus aguas,
deleitada y asombrada,
despierta la alborada
entre nuestros dedos
frescor de la mañana.
@María José Luque Fernández